Más allá de lo que sucedió la semana pasada en San Roque cuando un pit bull atacó a un niño y sus padres, las incidencias que protagonizan animales de este tipo no son, ni mucho menos, un hecho aislado. Basta poner sobre la mesa varios datos para entender que los perros peligrosos están de moda en la ciudad. En lo que va de año, la Policía Local ha cursado 43 denuncias relacionadas con este asunto. Un número de multas que deja muy atrás las 17 en todo el 2010 o las 8 en el 2009. El espectacular aumento no hay que buscarlo en que los agentes tengan este año un especial celo con los perros de presa, simplemente se dispara las denuncias porque también ha aumentado el número de perros de razas peligrosas en la ciudad. La lógica explicación la aporta Juan José Venero, superintendente de la Policía Local. Venero cree que en los últimos meses se ha desatado una especie de fiebre por estos animales y eso termina repercutiendo en las estadísticas policiales. Lo compara con lo que suc...